El primer disco de Plácido Carmesí sintetiza el trabajo de ocho años en conjunto entre el músico y compositor Diego Zaldivar y el escritor Nicolás Vilela. Allí confluyen y se traman las voces que fueron haciendo de una idea inaugural, una intensa máquina de canciones que, con los atentos aportes de Bruno Raffo en el bajo, transitan entre el jazz, la música brasilera y el rock nacional. Con lo urbano como espacio privilegiado, Plácido Carmesí sugiere la recuperación de ciertos lugares y detalles consignados a la sombra y el olvido por la precipitada velocidad de lo actual.